¿Alguna vez has buscado el mueble correcto durante años para encontrarlo en un lugar poco probable?
Bueno, tenemos. Hemos pasado los últimos cinco años para buscar el aparador perfecto para nuestro comedor, pero tuvimos un caso de sentimentalismo en combinación con utilidad que se interponía en nuestro camino una y otra vez. Como resultado, el enorme buffet/el aparador de la foto a continuación permaneció en nuestro comedor a pesar de su escala.
Poco después de comprar nuestra casa de remos en 2003, descubrimos la increíble serie de antigüedades y salvamento de Lorain Ave. de Cleveland. Independientemente de si estaba buscando una pequeña recuperación arquitectónica o una habitación completa con muebles antiguos, tenía que encontrar algo que su corazón quería.
Hoy, cuando Cleveland pasó por un renacimiento urbano, muchos de estos negocios estaban cerrados. Víctima del rejuvenecimiento del área de moda en Ohio y alquileres ascendentes, su cierre en última instancia significa el progreso para una ciudad que había caído en tiempos difíciles a fines de la década de 1990 y principios de los años 2000. Al mismo tiempo, el increíble recurso antiguo que era la avenida Lorain, es un recuerdo cada vez menor de nuestros días de luna de miel con un hogar fresco y primer lugar.
Durante una de nuestras visitas a Cleveland a principios de la década de 2000 después de tener nuestra casa por un corto tiempo, fuimos un comedor antiguo por solo unos 1,100 dólares estadounidenses. Una hermosa mesa, seis sillas, gabinete de porcelana y un gran buffet. Como conjunto adecuado, todos fueron de la década de 1940, construidos por un fabricante de muebles en Youngstown, Ohio, ¡y en general en una forma bastante decente! La escala de todo el set era grande para nuestra casa adosada de 15 ‘de ancho, pero era un gran precio y se mudó de una habitación a otra cuando instalamos nuestro comedor en varias áreas de la casa.
Además de comprar en los primeros días de la antigua propiedad de la casa, también nos recibieron muchos de los maravillosos vecinos, a quienes conocemos, en nuestro vecindario. Independientemente de si participa en reuniones en las casas del vecino o disfruta de su empresa en nuestra mesa de Cleveland Speissaal, conocer a nuestros vecinos, de los cuales muchos amigos de toda la vida se han convertido, el elemento inesperado de la propiedad residencial fue que tuvimos suerte de encontrar.
En algún momento en los últimos seis años, hemos visto nuestro alimentador vintage y dijo: “Sabes qué es lo bueno que fue este conjunto, no es muy adecuado para nuestra casa. Creo que tenemos que hacer un cambio. Y esto. El cambio debe comenzar con el buffet … así que era demasiado grande para nuestra casa.
Sí, el gran buffet ha sido el trabajo de nuestro comedor durante años. La cantidad de memoria que ofreció nos permitió mirar más allá de sus defectos claros y siempre actuales. Su ancho gigantesco de alguna manera se ajusta entre la ventana y el borde de la puerta con solo milímetros, como si fuera favorable vivir en nuestro comedor. Durante nuestra renovación del comedor, incluso se duplicó como área de almacenamiento.
Similar a un automóvil querido con 200 km, huele un poco y siempre es un cuarto de lóbulo con el aceite, que siempre lo llevó con éxito del punto A a B con poca fanfarria, nuestro buffet solo podría ser reemplazado por un mueble, esto. ¡JuuuuuuuUust correcto! No es el caso de que no hay mejores buffets, es solo que este buffet era “lo suficientemente bueno” y habíamos desarrollado un vínculo.
Desde el negocio antiguo hasta la casa de subastas, cada pieza que habíamos encontrado tuvo un error inherente. Demasiado elegante. Demasiado grande. Demasiado delicado. Demasiado pequeño. Demasiado moderno. Demasiado rústico. Sabíamos que queríamos algo más pequeño que encajaría bien en la habitación, pero aún necesitábamos almacenamiento. Además, Wendy tenía en su cabeza que todo lo que decidimos tenía que tener una tapa de mármol blanco y gris.
Literalmente habíamos buscado años y habíamos dado la esperanza de encontrar la pieza correcta. Nuestro enlace sentimental al buffet de gran tamaño, sin mencionar la abundancia del almacenamiento utilitario ofrecido, parecía frustrar nuestros esfuerzos y nuestro deseo exacto de encontrar esta pieza perfecta. Esto puede sonar kitschy, pero teníamos una necesidad poco realista de que nuestro posterior hallazgo llene el almacenamiento y la sentimalidad que nuestro buffet renunció. Una tarea bastante imposible si la búsqueda es más o menos desplazamiento de eBay, FirstDibs o sitios web de subastas.
Hace aproximadamente un año y medio, uno de estos vecinos nos mencionó que se sintió tan recibido en nuestro nuevo hogar y que habíamos muerto con amigos de la vida. Era mayor y estaba en salud, pero todavía se sentía repentina e inesperadamente. Fue una de las primeras personas en invitarnos a una fiesta en su casa después de mudarnos al vecindario, y siempre disfrutamos charlando y poniéndonos al día con él.
Después de la muerte de nuestro amigo, tuvimos la oportunidad de conocer a parte de su maravillosa familia, incluido su sobrino, que trató la propiedad. Durante este tiempo y después de que su familia eligió los objetos que querían mantener como un recuerdo, el sobrino de nuestro amigo preguntó si había algo de la finca que nos gustaría comprar antes de ir a la subasta.
Con la esperanza de encontrar algo que tenga sentido y nos recuerde a nuestro amigo y vecinos, miramos sus objetos restantes y esperábamos encontrar algo que podamos recordarlo. Para nuestra sorpresa, encontramos varios objetos maravillosos. Tenía una mármol antiguo de tamaño mediano, que guardaba en su comedor. Fue realmente agradable y nos sorprendió mucho que nadie en su familia quisiera. Después de hablar con su familia, medido y decidido que parecía sobre lo correcto, descubrimos que podríamos haber encontrado nuestro unicornio. Wendy tomó esta foto y decidimos que podría ser perfecto, pero incluso si no fuera así, sería perfecto para nosotros.
La pieza no solo se veía genial, tenía una tapa de mármol y ofreció algo de almacenamiento abierto requerido, sino que también tenía la conexión sentimental que esperábamos. Siempre podríamos pensar en nuestro difunto amigo y vecinos cuando lo tratamos en nuestro comedor.
En anticipación de la nueva pieza, tuvimos que limpiar el viejo buffet. Con cuatro cajones grandes, dos armarios y dos cajones más pequeños, todos los cuales están completamente llenos, nos sorprendió la cantidad que tenía es un eufemismo.
Teníamos servilletas, velas, luces de té y póster en abundancia …
… bolsas con ropa de mesa, corredores y semillas de almohadas …
… y más alcohol del que podemos beber razonablemente. Después de dejar que el viejo buffet fuera del viejo buffet de su lugar de larga data para eliminar una gran parte de estos objetos y mantener y reservar el nuevo gabinete, deseamos el viejo buffet y lo deseamos bien. El lugar para nuestro nuevo aparador estaba terminado y se veía bastante vacío.
Después de llevarlo cuidadosamente a nuestra casa desde su hogar anterior, lo hemos hecho una sensación del tamaño del tamaño. Fue un shock cuando nos acostumbramos al monstruo monolítico que cubrió completamente la pared entre la ventana y la puerta, pero eso fue un toque de aire fresco. El tamaño parecía ideal para la habitación.
Hemos rejuvenecido el acabado seco y agrietado un poco colocando un poco de alimentación de Howard’s Feed-N-Wax, una tapa de mármol. ¡Fue realmente perfecto!
El armario es una antigüedad sólida con una cola de golondrina, y creo que una caoba o una chapa de nogal.
El acabado no es perfecto, pero las pequeñas chips y las cosas no hacen nada para perjudicar la pieza.
Al principio se sentía pequeño, especialmente cuando nos acostumbramos a la escala en comparación con la pieza vieja. Pero antes de darnos cuenta, se sentía bien, ideal para la habitación.
Si te preguntas qué pasó con el viejo buffet, no te preocupes, no se ha ido y se separa de su set para siempre. Los padres de Wendy necesitaban una pieza más grande para su comedor, por lo que se la sacaron de las manos. Ahora está en casa en su comedor. Al igual que nuestro Mustang, que compró en 2012, podemos visitarlo cada vez que visitemos Cleveland nuevamente.
Estábamos casi abandonados, pero tropezamos con la pieza correcta que no solo satisfizo nuestras necesidades en lo que esperábamos, sino también para ofrecernos una conexión concreta con un querido amigo.
Nos gusta pensar que nuestro amigo, en lugar de su familia, que toma el gabinete, estaría feliz de saber que está a solo unos metros de casa en el que vivía y amaba tantos años. Al menos nos gusta saber que siempre tendremos algo en nuestra casa para recordarlo.
